¿Qué pasa con las relaciones de una noche? Son más frecuentes de lo que crees, por eso tienes que estar preparado para saber disfrutarlas sin perder la cabeza. Según un estudio de la psicóloga británica Anne Campbell, más de la mitad de las personas han tenido alguna vez un romance de una sola noche. Lo que también se llama tanto “one night stand”.

¿La primera vez de muchas?

Cuando pensamos en una relación de una vez, solemos imaginar un encuentro fortuito o prohibido con alguien a quien no veremos nunca más. Lo que prima es el deseo sexual, no el romance, y no se suele proyectar nada a corto, mediano ni, por supuesto largo plazo. Aunque hay excepciones donde lo que se suponía era una sola vez casual, se convirtió en años de larga y sólida relación.

Que los hombres digan no tener intención alguna de proseguir con la relación después de un único encuentro no es algo que llamaría la atención, desde Don Juan hasta hoy eso es bastante común. Lo que es más interesante del estudio de la Dra. Campbell es que la mayoría de las mujeres que protagonizan una sexcapada como esta, tampoco consideran que el encuentro sea el inicio de nada más allá. ¿Hemos perdido el romanticismo? ¿Estamos menos desesperados por encontrar un compañero? ¿Estamos conscientes de que somos dueños de nuestra sexualidad y la vivimos libremente? La respuesta a todas estas preguntas es un rotundo sí.

Sin embargo, aún hay una brecha cultural y emocional entre hombres y mujeres en este aspecto. Mientras la mayoría de los caballeros se sienten estupendamente el día después, solo el 54% se sienten felices. El resto parecen sentirse arrepentidas y usadas.

A quién elegimos para una one stand night

Campbell encontró que los hombres tienden a bajar sus estándares cuando eligen una compañera de una sola noche. Es normal, solo dirigen su atención al atractivo sexual de la mujer y la satisfacción que desean obtener, ni siquiera tiene que ser un “10” físicamente. Las mujeres son un poco más selectivas, prefieren volver solas a casa si no encuentran un varón que llene sus expectativas aunque sea por un rato. Puede ser guapo pero tonto, tonto pero rico, gracioso aunque feo… y ante todo, tiene que saber seducir. Las mujeres necesitan la seducción aunque sepan que será un encuentro de una sola vez.

Cuidados a la hora de un romance de una noche

Si te apetece tener esa relación, adelante, solo tú eres dueño de tu sexualidad y nadie puede prejudgarte. Ahora bien, hay algunos puntos que tienes que considerar.
Protégete de infecciones de transmisión sexual. Utiliza siempre un preservativo. Lleva uno contigo por si tu compañía no tiene. No importa lo caliente que esté el momento, haz una pausa y cuídate. ,
Si algo de lo que sucede no te gusta, estás en tu derecho de comunicarlo y de pedir que se haga de otra forma o se detenga todo el asunto. No importa que se trate de una relación relámpago, la comunicación debe estar ahí, y el respeto también.
Hablando de respeto, lo que sucede entre dos, se queda entre dos. No cuentes ni te vanaglories de la relación que has tenido, la intimidad que compartiste es solo de dos personas, tú y tu pareja.
Disfruta libremente. No finjas. Una de las mayores libertades de no volver a ver al otro es dar rienda suelta a tus fantasías sin considerar qué le parecerá a la mañana siguiente. Comunica, pide, pregunta, goza y haz gozar.

La mañana siguiente al one stand night

Si terminas durmiendo junto con tu pareja del momento, la mañana siguiente puede ser un momento incómodo. Para evitarlo sigue los siguientes consejos:

Nunca te vayas sin despedirte. Aunque no vayas a continuar la relación, no debes perder de vista que la otra persona es un ser humano como tú. Respeta eso.
Está bien darse una ducha y mantener una conversación cálida y fresca antes de decir adiós. Hasta cabe la posibilidad de compartir un desayuno antes de ir a trabajar o volver a tu vida.
Cuida las formas. Haz que te recuerden con una sonrisa, no con desagrado.
Si realmente no tienes ninguna intención de volver a ver a esa persona, no le des tu número de teléfono o cualquier otro dato identificatorio. Nunca prometas llamar si no lo vas a hacer.

Las relaciones de una noche son micro parejas con un tiempo muy corto y definido. Por eso mismo nunca hay que perder de vista que, mientras estamos con ese otro eventual, nuestra compañía es alguien con quien no planeamos tener algo a largo plazo… pero también podría convertirse en un compañero para el resto de tu vida. Después de todo, en el sexo se descubren muchas compatibilidades e incompatibilidades de una pareja.